sábado, 11 de junio de 2016

CONSECUENTE Y CONSISTENTE

En nuestra vida tenemos que aprender a ser y actuar como hijos de Dios, por ellos debemos ser personas consecuentes y consistentes, pero ¿Que significa ser consecuente? Y ¿qué significa ser consistente?
Consecuente: La definición que da la Real Academia Española es “que sigue en orden respecto de algo, o está situado o colocado a su continuación” y “dicho de una persona: cuya conducta guarda correspondencia lógica con los principios que profesa”. Se denomina de esta manera a las personas que llevan a la práctica lo que dicen y creen, aquéllos que son fieles a sus principios e ideas.
Consistente:  según la enciclopedia Vox 1, editorial Larousse 2009 significa algo que es resistente o duradero, por ejemplo, una mesa que perdure durante un lapso de tiempo establecido podríamos decir que es una mesa consistente

El ser consecuentes tiene que ver con desarrollar continuidad en nuestra vida. La palabra enseña que nuestro si tiene que ser si, y nuestro no, no (Mateo 5:37). Esto tiene que ver con tener determinación. Un cristiano consecuente es alguien que actúa bajo los principios de Dios

Digamos que estas en una competencia, y faltando 100 metros para llegar a la meta, abandonas la carrera, dicen que es lo mismo que si no hubiese corrido. Yo digo que es peor porque se invirtió tiempo y esfuerzo para nada; quizá abandonaste por cansancio, por falta de dirección, o porque simplemente no veías la meta, en fin, todo son excusas; perdiste.

Alguien que cursa una carrera y abandona faltándole pocas materias, no solo se queda sin el título, sino que además desperdicia todas las materias aprobadas, desperdicia el tiempo, desperdicia los recursos y su vida misma. Por eso joven esfuérzate y si no estás estudiando o trabajando, déjame decirte que estás perdiendo el tiempo, y el tiempo es importante.

El ser consistente tiene que ver con mantener el mismo nivel de calidad y entrega en lo que hacemos. 

Si comienzas algo con excelencia, pero lo terminas de forma mediocre, no solo tendrás algo mediocre, sino que además opacarás la excelencia primera. Por eso es necesario ser consistente.

La biblia está llena de historias de personajes que se olvidaron de la pereza y empezaron a trabajar, uno de ellos es Gayo


El mensaje para Gayo (3 Juan, 1)

En su tercera carta el apóstol Juan centra su atención al redentor de 3 personajes, pero fue dirigida especialmente a Gayo, (v. 1)
Cabe mencionar que en el nuevo testamento se menciona 4 veces este nombre,
1.    Gayo, el compañero de Pablo y nativo de Macedonia, quien fue atacado en una revuelta en Éfeso (Hechos 19:29).
2.    Gayo, un corintio que se convirtió y bautizó bajo el ministerio de Pablo (I Corintios 1:14).
3.    Gayo, un hombre de Derbe que acompañó a Pablo en su último viaje a Jerusalén (Hechos 20:4).
4.    Gayo, el cristiano ejemplar, miembro de una de las iglesias que estaban bajo la supervisión de Juan y a quien se dirige esta carta.  Veamos lo que nos enseña Dios a nosotros hoy a través de esta carta

¿Pero quién fue Gayo?

A.    SU CARÁCTER:
1.    Por su carácter se hace acreedor del aprecio y cariño de Juan (vs. 1-2).  Juan le llama el amado, palabra que repite cuatro veces en su mensaje a Gayo (vs. 1,2,5,11).  Estas son palabras que expresan apoyo e interés por los demás cristianos.  ¿Necesitamos nosotros tener a alguien que nos apoye?  Juan también ora por su bienestar físico.  Él Sabía que Jesús nunca se olvida que el hombre también tiene necesidades físicas.  Cristo puede proveer tanto para las necesidades espirituales como también para suplir las necesidades diarias que el cuerpo físico necesita.

2.    Era un cristiano consecuente, que andaba en la verdad (vs. 3-4), y el apóstol se regocija por esta razón.  Aprendamos a expresar nuestro aprecio y estímulo, no sólo nuestras críticas y censuras cuando alguien falla.

3.    Era un cristiano hospitalario (vs. 5-6).  El corazón y el hogar de Gayo estaban abiertos para compartir con los que expandían las buenas noticias del Reino de Dios.  Su consagración completa se puede ver porque tiene su bolsa y las puertas de su hogar abiertos para ayudar a los misioneros del Evangelio, misioneros que no gozaban de las ventajas que ahora gozamos en el siglo XX.  ¿Podemos aplicar los vs. 5-8 en nuestro medio?  ¿Podemos practicar la hospitalidad en estos tiempos?
GAYO es un buen ejemplo de un cristiano consecuente y constante ya que fue un cristiano que por la carta podemos decir fue creciendo día con día, y no bajo su nivel, para que Juan le diga amado, habla mucho de la estima que le tenía y el tipo de cristiano que era él.

Jóvenes como hijos de Dios no seamos como insensatos, porque la voluntad de Dios es que seamos constantes, la forma en la que vivimos habla mucho de nuestra relación con Dios.

Anímate a hacer las cosas diferentes, recuerda que el reino solo los violentos lo arrebatan.

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