Permaneciendo en la transformación
Juan 12:24
Para
el grano poder dar frutos este debe morir, esto es algo que muchos no logramos
comprender, pero que la naturaleza misma nos da ejemplos de lo que pasa cuando
nos dejamos transformar ¿has escuchado del proceso que lleva a una oruga a
convertirse en una mariposa? Es muy probable que, si lo hayas escuchado en algún
momento, el ciclo de vida de las mariposas para definirse y llegar a la
madures, es un proceso largo, y que en varios momentos tiene que cambiar su
forma física, a esto se le conoce como metamorfosis. La metamorfosis (del griego
“Meta-Morfé” que significa, mas allá de la forma anterior) en las mariposas es
un proceso donde la oruga se somete a cambiar por completo con tal de alcanzar
su propósito en la vida.
En
nuestra vida espiritual nosotros necesitamos estar en una constante metamorfosis,
estar en un constante cambio, en un constante CRECIMIENTO espiritual, y esto
para llegar a ser como Dios quiere necesitamos pasar por etapas que nos hacen
madurar, nos enseñan a tomar mejores decisiones y sobre todo ser fiel durante
el proceso.
El Pastor de ovejas que termino
siendo Rey. 1 Samuel 16:8-13
Cuando
Samuel fue a la casa de Isaí por orden de Dios a buscar a David, Samuel ve a
los hermanos de mayores de David, sin embargo Dios le dice que no son ellos,
que no se fije en su parecer; quizá de pronto David no tenía la pinta de Rey, y su
padre así lo pensaba puesto que era el menor, era hijo fuera de matrimonio, como quiera que se vea tenia cosas que para muchos lo hacían no calificar; ni siquiera lo llamaron cuando
el profeta llego, pero Dios tenía un propósito, quizás tú no te das cuenta de
lo que Dios ha puesto en tus manos y es por los agentes externos que te
descalifican, por opiniones ajenas no puedes ver lo que Dios ha puesto en ti, pero yo quiero decirte
que cuando si tu tienes como propósito de Dios ser rey o reina, lo vas a ser porque a Dios le place, pero eso
no significa que no debes hacer nada, Dios puso la capacidad David pero el tuvo
que demostrar que estaba listo, y así fue, todo empezó cuando un filisteo al
cual toda la fuerza armada de Israel tenia miedo, este gigante llego durante 40
días y las fuerzas Israelís no hacían nada por miedo, el pequeño David vio la
oportunidad y con una armadura que le quedaba grande, fue a la batalla contra
ese gigante, y fue en El nombre de Jehová de los ejércitos; esta es nuestra
primera clave.
Hacerlo todo para Dios y por Dios (1
Reyes 17:45)
David se lanzó ante una batalla donde cualquiera
le hubiera apostado en contra, Pero tuvo claras sus convicciones, eso le dio la
victoria. Ten confianza en tu Dios, por más difícil que sea vea el panorama, tu
Dios te dará la fuerza para vencer a cualquier gigante.
pero
debes hacer algo, demostrar que confías en Dios tienes que luchar, enfrentar
las situaciones sin miedo.
¿Porque
no alcanzamos el nivel que Dios quiere?
Muchas
veces es por nuestra falta de confianza en Dios, la falta de fe entorpece
nuestro crecimiento, ya que no tomamos los retos, y sin retos no podremos
madurar.
También
por la falta de paciencia, en nuestra cultura moderna donde todo va más rápido queremos
que las cosas sucedan de inmediato, pero eso no es posible, debemos recordar
que Dios no está ligado a nuestro tiempo la palabra enseña en Mateo 24:35 que
todo va pasar, pero su palabra jamás pasara.
Es
algo curioso la sociedad actual porque, aunque las cosas van más rápido, el
tiempo rinde menos, Las personas olvidan lo esencial, vivir en el amor de Dios
y esto es lo principal porque sin amor de Dios, jamás podremos hacer las cosas
por amor a El
Se fuerte cuando Dios este puliendo
(Juan 15:1-4)
La
palabra dice que Dios mismo cortara todo lo que no sea fructífero, yo quiero
preguntarte ¿en cuales áreas no estás dando fruto?, a veces las áreas que nos
secan son las que más nos gustan, y cuando Dios dice que las cortará debemos
ser fuertes, es igual que un jardinero le quita las ramas malas a un árbol,
Dios nos quita lo que nos hace morir, Jesús dice que si permanecemos daremos más fruto, nosotros que conocemos las
palabra de vida, debemos permanecer porque con estos cambios Dios nos hará dar aún
más frutos.
¿Pero
exactamente de cuales frutos hablamos? ¿Cuáles son los frutos que debemos
buscar?
“Más el fruto del Espíritu
es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,
mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.
Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos.
Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu.
No nos hagamos vanagloriosos, irritándonos unos a otros, envidiándonos unos a otros”.
mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.
Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos.
Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu.
No nos hagamos vanagloriosos, irritándonos unos a otros, envidiándonos unos a otros”.
Gálatas 5:22-26
La
palabra no enseña cual debe ser nuestro enfoque, cada personaje en la palabra
de Dios tiene su historia, hoy vimos a David, el dulce cantor de Israel tuvo
que aprender a amar, a perdonar, a tener paciencia, tuvo que aprender a
respetar, aprendió a honrar. Podemos analizar a todas las personas de nos dan
ejemplo en la biblia, y todos tuvieron que pasar por una metamorfosis, que los
llevo al límite, y no cedieron, quien más que nuestro maestro Cristo dándonos el
ejemplo en todo.
Todos
tenemos que pasar por esas etapas, ¿la estás pasando tú? ¿O te estas durmiendo?
Porque la única forma de no pasar por la metamorfosis es quedarnos siendo
orugas, pero la voluntad de Dios es que caminemos, que crezcamos que
edifiquemos sobre el fundamento de Cristo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario